Se debe de conocer el proceso y complementar la experiencia para intentar maximizar los ahorros, minimizar costos, acelerar el tiempo de transición, mitigar riesgos y generar la mejor experiencia posible
Obtener el registro de “Usuario Calificado” y lograr aprovechar las capacidades que te permite este esquema puede ser de gran beneficio para los consumidores de energía. Produce valor desde el aspecto económico, de responsabilidad con el medio ambiente y de cumplimiento regulatorio.
Sin embargo, para asegurar estos beneficios, se requiere planeación, entendimiento, análisis, negociación y seguimiento. Es un proceso de retos, que, con la experiencia y el conocimiento adecuado se logran convertir los obstáculos en ganancias.
Estos ocho retos son relevantes en todos los casos. Para cada reto existen soluciones. Se debe de conocer el proceso y complementar la experiencia para intentar maximizar los ahorros, minimizar costos, acelerar el tiempo de transición, mitigar riesgos y generar la mejor experiencia posible.
Cada mes que no se avanza en el proceso se genera un costo de oportunidad en promedio del 15% de su presupuesto, además de asumir riesgo del constante incremento de precios de energía, a la cada vez más evidente escasez de nuevos proyectos de energía, lo cual evita maximizar los beneficios. Convirtamos los retos en oportunidades y busquemos concretar los beneficios a través de conocimiento y decisiones de negocio respaldadas por experiencia e inteligencia de mercado.
Reto 1:
La incertidumbre regulatoria evita avanzar. La incertidumbre ha provocado miedo a los consumidores de energía. Con frecuencia, se teme que el gobierno los “castigue” de alguna manera por cambiar de CFE Suministro Básico a alguna otra alternativa de suministro eléctrico distinta. La decisión de cambiar de suministrador se basa en aspectos económicos y de sustentabilidad, centrándose en el beneficio de poder elegir y negociar términos y condiciones, reducir costos y recibir energía desde fuentes más limpias. Los negocios buscan cumplir con metas corporativas y, por lo tanto, deben de evaluar sus alternativas. La decisión de migrar a otros esquemas es permitida, siempre y cuando se cumplan con ciertos parámetros que establece la ley. El reto se centra en: 1) entender la regulación y su aplicabilidad y 2) evitar perder tiempo en la toma de decisión, lo cual genera costos de oportunidad significativos.
Se debe de recordar que las empresas necesitan cumplir con requisitos de negocio y muchas veces, el temor de avanzar pone en riesgo su competitividad en su industria.
Reto 2:
Elegir la mejor alternativa de suministro. Los consumidores de energía con frecuencia llevan a cabo sus procesos de evaluación de ofertas internamente. El reto está en cómo identificar qué oferta les es más conveniente, desde tecnología, mecanismos comerciales, tipo de producto, variables, riesgos, precio, etc. ¿Qué es una oferta justa, cuál se adapta mejor a mi perfil y cuál es el estándar de mercado? Es muy difícil comparar y además conocer los precios de mercado actuales, especialmente sin llevar a cabo un proceso de licitación a través de algún consultor con experiencia e interés alineado al consumidor.
Reto 3:
Incertidumbre sobre el cumplimiento de Código de Red. Esta regulación se debe de cumplir independientemente si el consumidor recibe suministro eléctrico de CFE Suministro Básico o de cualquier otro suministrador, generador en autoabastecimiento, Suministro Calificado o generación en sitio. La migración al Mercado Eléctrico Mayorista realmente no implica un costo adicional, ya que el Código de Red se debe de estar cumpliendo desde el mes de abril del 2019.
Reto 4:
Incertidumbre sobre el cumplimiento. Confusión en las variables de su tarifa final. La mayoría de los consumidores de energía que optan por un contrato privado, no cuentan con suficiente entendimiento de las variables que componen su tarifa final. Esto sucede a raíz del desconocimiento y la complejidad de elementos que impactan su presupuesto final, aunado a cambios de regulación, políticos y de mercado que influyen e impactan en el contrato de suministro. Pueden existir mecanismos comerciales, referencias a precios de combustibles volátiles, costos regulados, tipo de cambio, inflación, congestión, etc. Por tanto, con frecuencia cuestionan el movimiento de tarifa mes a mes.
Reto 5:
Proceso de registro como Usuario Calificado. El proceso es lento y complicado y por lo tanto, provoca retrasos en el inicio de suministro y generación de ahorros. Existe complejidad en la coordinación de los tiempos, los compromisos con el suministrador, la adquisición e instalación de equipos y el caso de negocio que se presentó a corporativo para validar el proyecto de migración al Mercado Eléctrico Mayorista. La atención al detalle en la documentación es clave, la coordinación entre las partes, el conocimiento del proceso, y el seguimiento del mismo.
Reto 6:
Incertidumbre en ROI: Es complejo calcular el retorno de inversión y el tiempo en el cual se recuperará la inversión del proyecto integral. Se debe incluir tanto los ahorros por generar, considerando distintos escenarios de acuerdo con las variables incorporadas en la fórmula de tarifa final; como también la inversión por realizarse en equipos y adecuaciones para el cambio de un esquema de suministro a otro. Para algunos casos, se contemplan también gastos adicionales de asesoría o bien se eliminan costos que están contemplados ya en el presupuesto destinado a cumplir con Código de Red.
Reto 7:
Cómo abordar un posible cambio en ley. A raíz del movimiento regulatorio que se ha visto los últimos tres años en el mercado; los consumidores temen un posible cambio en ley en el futuro. ¿Qué pasa si se firma un contrato de suministro de energía y algo en ese sentido sucede en un futuro? Tanto los consumidores como los suministradores deben protegerse ante esta incertidumbre que no podemos controlar. En este caso, se debe de incorporar clausulado contractual que contemple este escenario e impida penalizaciones por terminación anticipada. En estos casos; el suministro físico de energía no se vería impedido, sino que se generaría un cambio de estructura de costos y probablemente un cambio de suministrador.
Reto 8:
No se concretan los ahorros estimados. Debido al desconocimiento y la falta de consideración de variables que pueden impactar precio, terminan no concretando los ahorros que se estimaron inicialmente. Es de suma importancia entender los riesgos y los factores que pudieran impactar el precio para evitar sorpresas en un futuro. Recordemos que el cambio de suministrador de energía toma tiempo y; por tanto, es tiempo que debemos seguir monitoreando el mercado para ajustar lo que deberíamos esperar como presupuesto. Además; una vez que se inicie el contrato de suministro, es crítico dar seguimiento a la facturación, a los eventuales cambios regulatorios y a las fuerzas del mercado que puedan llegar a influir e impactar los costos; y demandar la toma de decisiones continua para maximizar los ahorros y minimizar los riesgos en precio
Maria Jose Treviño
Directora General en Acclaim Energy México.