Este año 2019 ha sido un año de cambios. México con su nueva administración y partido político dominante, ha realizado modificaciones ideológicas y cambios estructurales que han alterado el rumbo de ciertos aspectos de algunas de las Reformas más influyentes en nuestro futuro económico. En este caso, me referiré a la Energética. Sostuvimos la restructuración del órgano regulador, seguimos la crónica de alteraciones en contratos “injustos” ya firmados y vivimos una evolución de un mercado que apenas arranca. En este, se observaron cambios en inversión y variaciones en tendencias de adquisiciones corporativas de energía eléctrica ejercidas por las grandes empresas industriales y comerciales del país.
A raíz de la Reforma Energética, surgió una resistencia al cambio debido al miedo a lo desconocido. Con el tiempo, producto de experiencias vividas, casos de éxito e historias de terror, las empresas fueron conociendo mas y ganando confianza. Había mas información, pero aún hasta la fecha, ante la escasa estandarización, la participación en los mercados se hace muy compleja, sin embargo, también la vuelve atractiva ya que presenta un sinfín de oportunidades. A pesar de las altas y bajas, los participantes del mercado han aprendido mucho, lo cual ha llevado a algunos a concretar ahorros entre el 15-40% en su presupuesto de energía eléctrica. Poco a poco las empresas toman más en serio la evaluación de alternativas de suministro en auto-abasto y ahora con más frecuencia en el Mercado Eléctrico Mayorista. En los primeros años, veíamos participando principalmente a empresas grandes, hoy se extiende la oportunidad a empresas de menor tamaño, multiplicando los beneficios que crea la presencia de competencia en un mercado. Consecuentemente, vemos su efecto positivo que influye en la competitividad de todas las ramas industriales, las cuales permanecen atractivas por sus costos de operación bajos.
En el 2019 se enfrentaron cambios para bien y para mal que afectaron y revolucionaron el mercado. Al dirigir una empresa cuya función es interpretar los cambios políticos, regulatorios y de mercado para crear estrategias de administración energética y mitigación de riesgos para empresas altas consumidoras de energía, obtuvimos visibilidad hacia la realidad de lo que sucedió este 2019. Nuestra posición y el rol que jugamos en el mercado nos impulsa a promover la transparencia para detonar un funcionamiento de este, donde todos los participantes se vean beneficiados. Les comparto los 12 principales temas que prevalecieron en el año que está por terminar:
- A raíz de la incertidumbre en tarifas de CFE Suministro Básico y la presión de negocio provocada por falta de crecimiento económico del país, las empresas han acelerado su decisión por firmar contratos de suministro de energía eléctrica con Generadores y Suministradores Calificados.
- En muchas empresas, los altos ejecutivos delegan este proceso de adquisición de energía, sin embargo, deben de permanecer activos y muy de cerca en todo el proceso ya que ellos entenderán la estrategia global de la empresa donde el presupuesto energético y el perfil de riesgos juega un rol que debe ir alineado a las demás áreas de negocio.
- La oferta de energía eléctrica ha disminuido considerablemente ya que la demanda ha incrementado y el desarrollo de nuevos proyectos de generación se ha visto frenada por distintos factores.
- La cancelación de proyectos de líneas de transmisión está afectando gravemente el potencial para atender la demanda futura de consumo eléctrico del país.
- Suministro Calificado se ha vuelto una opción más atractiva que el auto-abasto.
- Los Suministradores Calificados están cada vez dispuestos a compartir mas riesgos con el Consumidor.
- Existe un creciente interés por generación en sitio o bien generación distribuida debido a la falta de confiabilidad, calidad y capacidad del sistema en ciertas zonas del país.
- A pesar de la labor educativa que ha brindado la CRE y otros expertos, aún existe desconocimiento profundo en el tema de Código de Red, lo cual pone en riesgo de sanciones a muchas empresas. La educación sobre el tema inició muy tarde.
- En práctica, el proceso de cambio de medidores, interconexión y transición a un nuevo Suministrador se ha vuelto más complejo y tardado. Existe una ausencia de alineación entre las partes involucradas.
- Las tarifas de CFE Suministro Básico todavía son muy altas para los industriales, aún considerando su descenso durante el 2019.
- A raíz de la incertidumbre política, y confusión del rumbo que está tomando el mercado, muchas empresas han pospuesto considerablemente su decisión por evaluar alternativas. Esto les ha impactado negativamente ya que los ahorros por conseguir han ido disminuyendo con el tiempo debido a la oferta y demanda.
- La incertidumbre regulatoria ha disminuido, sin embargo, permanece como factor crucial en el impedimento de inversión en proyectos de generación, lo cual ha desacelerado el mercado energético.
Con estas consideraciones, las Empresas, de la mano de firmas serias especializadas en la materia, deben de aprovechar el suministro aún disponible y beneficiarse de buenos porcentajes de ahorro en su consumo eléctrico. Existen elementos sobre los cuales los participantes de mercado no tenemos control, por lo que debemos tomar riendas en lo que sí podemos manejar para asegurar inversiones, presupuestos, y confiabilidad de suministro.
María José Treviño, Directora General, Acclaim Energy México