El 15 de mayo de 2020, el mercado eléctrico de México fue sacudido por el anuncio de una nueva política de despacho y afectaciones a permisos para nuevas plantas de generación renovable. La política restringió severamente la adición e integración de energías renovables en el portafolio energético de México, lo que resultaría en precios de energía más altos y un aumento de las emisiones de carbono (contaminantes) en el medio ambiente.
Lo siguiente no abordará los méritos o deméritos de esta política, sino que más bien destacará que el anuncio de la nueva política también ha enfatizado la necesidad urgente de México de una inversión significativa para actualizar y expandir su red de transmisión y distribución para:
- Enfrentar mejor los niveles de demanda de electricidad anteriores a COVID-19 y la demanda esperada, una vez que comience la recuperación económica y las operaciones vuelvan a los niveles tradicionales;
- La necesidad de llevar electricidad económica y limpia a áreas del país que sufren los altos precios de la energía, por ejemplo, Baja California Sur
Acclaim Energy siempre ha abogado por que el aumento de la capacidad de generación en México sin una actualización y expansión adecuada y completa de la red de transmisión y distribución no resolverá los problemas del mercado energético de México. De hecho, en algunos casos puede exacerbar algunos de estos problemas. México siempre puede voltear a ver lo que sucedió en ERCOT (Texas) debido a la importante adición de generación (en su mayoría renovable) en el oeste y sur de Texas. Esta nueva generación condujo a una congestión significativa en esas áreas y una reducción significativa en el impacto positivo que las energías renovables podrían ofrecer al mercado energético.
México, por otro lado, ya está sufriendo este malestar de ERCOT, ya que algunas áreas del país donde se ha agregado una generación significativa están experimentando un aumento en la congestión que se ha traducido en precios de energía más altos. La pregunta es, ¿qué se puede hacer para asignar suficientes recursos para mejorar la red de transmisión y distribución? Dados los desafíos presupuestarios de México y los posibles recursos financieros que se desvían a otros lugares, por ejemplo, la refinería Dos Bocas; un paso lógico sería aumentar las tasas de transmisión y distribución para financiar estos proyectos. Esta medida puede ser muy impopular entre los usuarios finales al principio, especialmente en el contexto de los tiempos económicos actuales.
Sin embargo, el impacto financiero soportado por los usuarios finales como resultado de tanto una red de transmisión y distribución inadecuada que conduce a la generación de apagones de energía como de la incapacidad de explotar por completo los beneficios de las energías renovables baratas y limpias, viene siendo mayor que el costo de tarifas de transmisión y distribución incrementadas pero pagadas durante un extendido plazo de tiempo.
¿Hay alguna otra alternativa en lugar de aumentar los costos de transmisión y distribución? De hecho, para los grandes usuarios de energía, pueden buscar formas de aumentar su confiabilidad de suministro y mejorar la calidad de su energía buscando más soluciones de autogeneración para satisfacer su propia demanda total o parcial, a través de soluciones de almacenamiento de energía, etc. Estas soluciones, ya sea de forma aislada o trabajando en conjunto, pueden proporcionar beneficios significativos a una empresa al:
- Reducir su dependencia de la red
- Ayudar a reducir el impacto económico de una interrupción
- Ahorrar en costos de energía
- Alcanzar objetivos de sostenibilidad corporativa
Otra forma de mejorar la confiabilidad es mediante la implementación del Código de Red, que es el conjunto de requisitos técnicos para mejorar la calidad de la electricidad y la confiabilidad del suministro. La implementación del Código de Red también debería aliviar el impacto económico de las interrupciones y los problemas con la red debido a mejores equipos eléctricos en las instalaciones de su empresa para proteger la producción, las herramientas y la maquinaria. Como tal, las empresas deben diseñar un plan de trabajo para implementar el Código de Red para mejorar la eficiencia y reducir el riesgo de multas por incumplimiento por parte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
El mercado energético de México es un rompecabezas muy complicado que requiere la colaboración de todas las partes involucradas (gobierno, generadores privados, etc.) para resolver la necesidad de equilibrar la política gubernamental con la realidad económica.
En este contexto, las empresas necesitan contar con personal interno o asesores externos como Acclaim para mantenerlo informado constantemente sobre las reglas, las opciones de mercado y los procesos para desarrollar una estrategia energética integral para ayudar a hacer frente a su demanda y costos de energía actuales y futuros. Especialmente, dado que la energía es uno de los cinco gastos principales para las empresas en México.